A la fecha interpuso 9 denuncias por agresión física. El profesor labora en la institución educativa Víctor Raúl Haya de la Torre. La mujer teme por su vida y pide al Poder Judicial acelerar trámites por tenencia de su hijo y alimentos que inició en el 2014.
Marlene Casilla Mamani, denunciante.
La ciudadana Marlene Casilla Mamani acudió a las instalaciones de Radio Uno denunciando ser objeto de violencia familiar.
“No pienso aguantar más maltratos, este señor me agredió en nueve oportunidades (…) en otras veces tiene denuncia por intento de homicidio, desfiguración de rostro. Aguante todo este tiempo por el qué dirán para que la gente no me señale. Estuve tolerando todo esto porque soy madre”.
La mujer identificó al agresor como “Walter Jiménez Cohaila, natural de Puno y docente por más de 20 años en la institución educativa Víctor Raúl Haya de la Torre”.
Indicó que a la fecha interpuso 9 denuncias por violencia familiar, siendo la última agresión ocurrida la noche del jueves en su vivienda. Según la mujer, fue golpeada con patadas y puñetes en el piso luego que ella intentara llevarse a su hijo de 10 años a cenar.
“Perdí el conocimiento, me pateo el estómago en especial los pulmones, en un agresión anterior me dañó el pulmón izquierdo a raíz de eso me vino taquicardias y estoy a punto de ser operada (…) el sabe muy bien que estoy y mal tengo derrame pleural de las taquicardias”, expresó.
Debido a una infidelidad cometida por el docente, la pareja se separó pero aún continúan viviendo bajo el mismo techo, no obstante la mujer inició -en el 2014- trámites en el módulo básico de justicia de Alto de la Alianza con la finalidad de aclarar la tenencia del menor y la manutención de alimentos, siendo la cantidad a entregar 350 soles, pero esta medida es cautelar dijo, por lo que instó al juez a cargo agilizar la sentencia.
“Un llamado especialmente al módulo de Alto de Alianza que por favor emita la sentencia lo antes posible no esperen que este señor me asesine en mi casa (…) a los padres de Víctor Raúl para que vean la clase de monstruo tienen en esa institución educativas”, expresó.
La agraviada aseguró temer por su vida pues en reiteradas ocasiones es amenazada de muerte. Ante ello gestionó hasta tres medidas de protección, pero estas no son acatadas por el denunciado. “Te voy a matar (…) te voy a decapitar y tu cabeza la voy a enterrar por Pachía, tus manos en el Intiorko, tu cuerpo por Santa Rosa, así te voy a matar. Así me amenaza”, relató.
