Viuda con 7 meses de gestación pide que no haya corrupción en las investigaciones mientras que su hija mayor exige la máxima sanción para el responsable del accidente que cegó la vida de su progenitor. «No es justo que nos deje sin padre y salga en libertad», dijo.
Así quedó el taxi tras el accidente que provocó un conductor que manejaba ebrio. Viuda clama por justicia. (Foto: Radio Uno)
EXIGEN CÁRCEL. La familia el taxista Efraín Ibáñez Cabrera (40) muerto en un violento accidente provocado por un conductor que manejaba bajo los efectos del alcohol, no se resignan y rechazan que el causante de la colisión sea liberado.
Con 7 meses de gestación la viuda de Ibáñez Cabrera, Felicita Cueva Quispe, pidió que el chofer Junior Alonzo Acosta Barreda (30) no sea liberado pues cegó la vida de su esposo y dejó en la orfandad a sus 3 hijas y al bebé que viene en camino.
Del mismo modo cuestionó el trabajo de la fiscal Kely Choque Ramos a quien acusó de no brindarle el apoyo como la parte afectada, y priorizar los derechos del responsable del accidente.
“Pensé que la fiscal me iba a dar una razón para apoyarme a mí, la parte agraviada, pero al contrario, me está pidiendo más pruebas, más pruebas ¿qué pruebas vamos a dar? Mi esposo está muerto, el carro está destrozado. Yo tengo que estar buscando justicia ¿por qué la policía me trata así, si están para apoyarme?”, cuestionó.
Agregó que en la comisaría Leguía fue maltratada por los efectivos policiales que le negaron el uso de los servicios higiénicos, obligándola a salir a la calle para que hiciera sus necesidades allí.
ASESINO
Por su parte Luz, hija de la pareja reiteró que Junior Alonzo Acosta Barreda no debe volver a las calles y por el contrario debe pagar por matar a su progenitor.
“No es justo que ese sujeto nos deje sin padre y salga en libertad. Es un asesino para mí porque mató de la peor manera a mi padre”, señaló.
Luz de 17 años, también relató que los amigos de su papá tuvieron que traer a Acosta Barreda porque «se había escapado 100 kilómetros viniendo a Tacna».
DOSAJE ETÍLICO
El abogado Miguel Martínez cuestionó el tiempo que transcurrió entre el accidente y el dosaje etílico practicado a Junior Alonzo Acosta Barreda.
Según dijo, el choque frontal se produjo aproximadamente a las 5.30 de la mañana y una hora después acudió la policía para las diligencias de ley.
Es por eso que recién a las 8.35 am, Acosta Barreda fue sometido al dosaje en la Sanidad de la Policía, sin presencia del fiscal,agregó.
«En ese lapso de dos horas, la familia y todos los pobladores presumen que algo ha podido suceder, (que hubo) tiempo suficiente para poder suministrarle algo para que baje el nivel de alcohol», comentó.