Por el sismo del pasado 12 de mayo en el suroeste de China, según informa la prensa local, el desbordamiento de lagos y embalses se ha convertido en la principal amenaza en las labores de rescate y reconstrucción de las zonas afectadas
Una treintena de lagos formados tras la obstrucción de los ríos por el seísmo de 8,0 grados en la escala de Richter, que tuvo su epicentro en la provincia de Sichuán, corren el peligro de desbordarse, ante la inminente llegada de las lluvias prevista por la Administración Meteorológica.
"Con todos estos medios podemos empezar oficialmente a tratar el problema de los lagos", dijo el ministro de Recursos Hídricos, Chen Lei, en una entrevista con el diario "China Daily".
El ministro subrayó que todas las personas que podrían verse afectadas por el desbordamiento del lago han sido ya evacuadas.
Pero además de los lagos, 69 presas que quedaron agrietadas en las zonas más devastadas por el terremoto están cerca de reventar y un total de 2.383, en Sichuán y en otras provincias vecinas, han sufrido daños, según confirmó hoy el Ministerio de Recursos Hídricos.
Los posibles derrames de las reservas ante la llegada de las lluvias amenazan a por lo menos 700.000 personas, estimó el ministerio, citado por la agencia oficial, Xinhua. Hasta ahora, 100.000 han sido ya evacuadas.
Según el último recuento oficial ofrecido hoy, la cifra de fallecidos por el temblor ascendió a 65.080 y la de desaparecidos a 23.150, mientras que más de 14,3 millones de personas han tenido que ser evacuadas y más de 360.000 resultaron heridas. (EFE. Pekín)