Un joven universitario de 20 años de edad fue intervenido la tarde de ayer luego de ser denunciado por el delito de violación sexual contra una escolar de 13 años que vivía a espaldas de la vivienda donde radicaba en Ciudad Nueva. Sujeto se habría aprovechado en más de una oportunidad de adolescente, como lo comprueba examen médico legal practicado a la víctima.
Sujeto acusado de violación podría recibir condena de 30 a 35 años
Un joven universitario de 20 años de edad fue intervenido esta tarde luego que familiares de una escolar de 13 años de edad lo acusaran de haber ultrajado en varias oportunidades a la menor y en su propia vivienda. El examen médico legal practicado a la víctima reveló que el insano varón no habría desflorado la cavidad vaginal de la niña y ésta presentaba serios daños producto de la agresión sexual.
Según revelaron padres de la menor ultrajada, la última vez que el intervenido habría abusado sexualmente de la pequeña, habría sido el pasado 26 de mayo de este año, en que los padres de la adolescente de iniciales E.B.D.N.Q. salieron a un compromiso y dejaron sola a la niña sin presagiar lo que sucedería al interior de su vivienda y que se enterarían al notar el cambio de conducta de la escolar.
Aquella noche, la niña que ya habría sido víctima del sujeto identificado como Brayen Luján Álvarez, escuchó ruidos al interior de su solitaria vivienda y procedió a esconderse debajo de su cama. Mientras guardaba silencio, el universitario aprovechó que el cuarto donde vivía alquilado quedaba atrás de la casa de su víctima y saltó el muro que separaba ambos inmuebles para aprovecharse de la menor, una vez más.
Ya en la vivienda, el sujeto buscó todos los renciones de la casa para encontrar a su víctima y al no ubicarla se quedó en silencio por un momento para simular que se había ido. Pero no fue así. Luego que la escolar saliera de su escondite, el insano varón la tomó nuevamente por la fuerza y dio rienda a sus bajos instintos. Esta penosa declaración fue la misma que relató la inconsolable pequeña, ante el pedido de sus padres que no se explicaban el cambio de conducta repentina de su hija.
Fue producto de esta declaración que los padres de la menor de 13 años de edad decidieron denunciar el hecho ante la fiscalía, ente del que esperan, solicite prisión preventiva contra el sujeto para que posteriormente el poder judicial dicte la sentencia respectiva que oscilaría entre 30 y 35 años de prisión por tratarse de una menor de 14 años de edad.
Este mismo agravante sería el que no permite a la legislación peruana que el sujeto afirme que el acto sexual se realizó con consentimiento de la víctima, debido a que tratándose de menores de 14 años, se considera el acto sexual como no consentido. Es más, según el abogado de la familia, el examen médico legal es contundente ya que arroja que no sólo desfloró la cavidad vaginal de la niña, sino que además practicó sexo contra natura al haberla ultrajado también por la cavidad anal.
