En una accidentada sesión, en que hubo una gresca entre pobladores del cono norte a favor y en contra del pedido de vacancia del alcalde de Ciudad Nueva, esta mañana por una ajustada votación, se desestimó el pedido de desafuero que pesaba contra el burgomaestre de la zona. A su salida, Hugo Mita se pronunció también sobre el pedido de prisión preventiva que presentará el fiscal Orlando Pari y la calificó de exagerada.
Alcalde del cono norte es investigado por prestar más de 55 mil nuevos soles y auto pagarselos con dinero del municipio
En una accidentada sesión, en que se registró una gresca entre opositores y ciudadanos a favor de la gestión del alcalde de Ciudad Nueva, Hugo Mita, esta mañana el concejo municipal de dicha jurisdicción desestimó por una ajustada votación, el pedido de desafuero que pesaba contra este burgomaestre. Enardecidos pobladores cercaron a alcalde para protegerlo, en tanto otro grupo intentaba reclamarle por irregularidades en su gestión. En medio de la gresca, pobladores de este distrito agredieron a periodistas de varios medios, entre ellos uno de RADIO UNO.
Fueron cinco votos, incluido el del alcalde, los que blindaron a Mita Alanoca y desestimaron el pedido de vacancia que pesaba en su contra, a solicitud del ciudadano Víctor Elmer Jareca Laura. La razón por la que se presentó el documento de desafuero ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), fue que el 16 de febrero del año pasado, el alcalde Hugo Mita ‘prestó’ en forma extraña la suma de 55 mil 836 nuevos soles para cubrir supuestamente los gastos del Carnaval “Costumbre de Mi Pueblo 2011” y tras regularizar el trámite presupuestario, se los auto pagó con dinero del municipio.
Esta razón fue suficiente para que Jareca Laura encontrara la oportunidad perfecta para intentar vacar a Mita Alanoca argumentando que dicho monto de ‘préstamo’ pudo nunca haber cubierto gastos municipales y ser devuelto sin que se produjera la entrega de dinero. Para decenas de pobladores que llegaron hasta el reducido espacio donde se desarrollaba la sesión, este ‘préstamo’ fue una forma de agilizar la organización de los carnavales, en tanto que para otros fue una marcada irregularidad que debía ser sancionada con su puesto.
Mientras el burgomaestre intentaba abandonar la municipalidad, cientos de pobladores se enfrentaron al frontis de la sede edil y ocasionaron serios daños a la propiedad pública, arremetiendo también contra periodistas que habían llegado a la zona a cubrir la información. Ya más tranquilo, el burgomaestre aseguró que no habían suficientes argumentos para vacarlo y sostuvo que era exagerado pedir prisión preventiva por la misma razón, que sólo fue –dijo- para agilizar los trámites de una actividad del pueblo.
