En el segundo día de protesta del distrito de Cocachacra, la situación en Islay se torna violenta. Los manifestantes arrojaron piedras en las instalaciones de que ocupan la empresa minera Southern que pretende llevar adelante el proyecto Tía María, aunque las vías de acceso aun permanecen desbloqueadas.
Pese a este escenario, los protestantes intentaron impedir el ingreso de carros cisternas desde el distrito de Cocachacra hacia la localidad de Mollendo. Los más afectados fueron los usuarios del transporte interprovincial terrestre, quienes quedaron imposibilitados de llegar a su destino.
El Presidente del Frente de Defensa del Valle de Tambo, Julio Gutiérrez afirmó que sólo levantarán la medida de fuerza cuando el Ministerio de Energía y Minas anule el proyecto minero Tía María. Por su parte la gobernadora de la provincia arequipeña de Islay, Mercedes Jordán, Refirió que los comercios, entidades públicas y bancarias atienden con normalidad en los demás distritos, a diferencia de las jurisdicciones Cocachacra y Deán Valdivia donde las actividades se desarrollan de manera restringida.
Durante el primer día de protesta un grupo de manifestantes fue dispersado por los custodios del orden, debido a que intentaron tomar el puente Santa Rosa, ubicado en la carretera Panamericana Sur, a la altura de la zona El Fiscal. Efectivos policiales permanecen alerta para reducir a los protestantes que aseguraron no darán su brazo a torcer si el gobierno no les garantiza el descarte definitivo del proyecto Tía María.