El número de víctimas mortales de un alud que enterró a un barrio de la localidad colombiana de Bello, se elevó a 35, tras el rescate de 11 cuerpos más, señaló el subdirector del socorro nacional de la Cruz Roja colombiana, Jorge Nova.
Indicó que los trabajos de rescate de más víctimas mortales continuarán siempre y cuando las condiciones climáticas lo permitan, en una tarea que están comprometidos los voluntarios de la Cruz Roja colombiana, la policía, el Ejército y voluntarios.
Las labores de rescate se concentran en tratar de ubicar a unas 90 personas que desaparecieron luego de que el domingo pasado un alud de lodo causado por las intensas lluvias, sepultó unas 50 viviendas en el municipio de Bello, departamento de Antioquia.
La tragedia desbordó la capacidad de respuesta del gobierno colombiano ante los desastres naturales, admitió el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en medio del dolor de las familias damnificadas.
Por su parte, el ministro del Interior y de Justicia, Germán Vargas, indicó que la mejor acción que el Estado colombiano puede hacer es recurrir al "estado de emergencia social", para facilitar créditos, aumentar impuestos, entre otras facilidades a fin de atender a los damnificados y reconstruir la infraestructura dañada.
Según cifras oficiales del gobierno colombiano, en lo que va del año, las dos temporadas de lluvias en Colombia han dejado un saldo trágico de 206 muertos, 119 desaparecidos, 246 heridos y 1.61 millones de damnificados.
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