Los cánticos racistas dirigidos hacia a Samuel Eto'o han obligado a detener durante unos tres minutos el partido Cagliari-Inter de Milán correspondiente a la séptima jornada de la Liga italiana, que curiosamente se resolvió a favor del equipo de Rafa Benítez con un gol del delantero camerunés.
Nada más iniciarse el partido, los cánticos racistas en el Stadio Sant'Elia de Cerdeña llevaron al árbitro a parar el encuentro y dirigirse a los banquillos. Con el partido detenido, la megafonía del estadio avisó a los aficionados de que, si no cesaban los cánticos, el partido podía suspenderse definitivamente.
Finalmente el partido se disputó y fue el propio Eto'o quien dio la victoria al Inter (0-1) con un gran disparo desde fuera del área en el minuto 39.
Durante su estancia en el Barcelona, en la temporada 2005/06, el camerunés protagonizó un episodio similar en La Romareda, el campo del Zaragoza , donde amenazó con abandonar el campo por los gritos racistas. Al final, tanto sus compañeros como el árbitro le convencieron para que continuara jugando. No era la primera vez. La temporada anterior Eto'o se encontró con una situación muy parecida en el mismo campo. Ahora le ha tocado revivirlo en Italia.
La Federación italiana dio instrucciones a los árbitros para que se sintieran con total libertad para suspender los encuentros cuando escucharan en las gradas cantos racistas. El precedente por el que se llegó a esta orden lo vivió en sus propias carnes Mario Balotelli, cuando militaba en las filas del Inter de Milan. El actual jugador del Manchester City, italiano de origen ghanés, tuvo que soportar insultos de los hinchas del Juventus hace dos años también por el color de su piel. El equipo juventino fue castigado a jugar un partido a puertas cerradas. Además, a principios de este año también tuvo que soportar insultos del público del Chievo Verona . En esa ocasión el jugador abandonó el campo aplaudiendo irónicamente al público y fue multado con 7.000 euros por "provocar". El presidente del Chievo, Campedelli, acusó al jugador de incitar a los violentos. "El problema no es el color de su piel, sino la actitud provocadora que tiene y que incita a que le insulten", insistió. A lo que se sumó el alcalde de Verona, Flavio Tosi, que recordó que "un profesional tiene que aguantar pitos e insultos".
No es lo que piensa la Federación italiana, que alentó a los árbitros a tomar medidas cuando lo considerasen oportuno. Sin embargo esta es la primera vez que alguno toma la decisión de parar un encuentro y ameneza con suspenderso en caso de que los gritos racistas no cesen.
El caso de Eto'o ha ocurrido pocos días después de que tuviera que suspenderse el partido clasificatorio para la Eurcopa 2012 entre Italia y Serbia. En este caso los ultras serbios obligaron a las autoriades a parar el encuentro tras seis minutos de partido, debido al lanzamiento de bengalas y todo tipo de objetos contra los jugadores. Los incidentes se saldaron con 17 detenciones.
Cortesía: El País
