Dos viviendas de material rústico quedaron redichas a cenizas, tras un incendio producido en la parte baja de la ciudad.
El siniestro se inició a causa de una fuga de gas que se presentó en una de las viviendas, que no pudo ser controlado por los vecinos del sector.
Ante este hecho los vecinos optaron por dar aviso a los integrantes del cuerpo de bomberos, quienes llegaron a la zona para sofocar las llamas.
No fue mucho lo que pudieron hacer los hombres de rojo, pues todo estaba casi perdido.
Vecinos del sector indicaron que los propietarios de las viviendas se encontraban laborando en las ferias de venta e comida de todos los lunes en el cono norte de la ciudad.