Estados Unidos dijo confiar en que las dos partes de la crisis de Honduras respetarán la decisión del Congreso sobre la restitución del depuesto presidente Manuel Zelaya, si bien advirtió de que la aplicación del acuerdo será "complicada" y necesitará el respaldo de la comunidad internacional.
Tanto Zelaya como el gobernante de facto, Roberto Micheletti, "se han comprometido a respetar la decisión del congreso (…) les creo", aseguró el secretario de Estado adjunto para el Hemisferio Occidental, Thomas Shannon, en rueda de prensa telefónica desde Tegucigalpa con periodistas en Washington.
Ambos "reconocen que es el Congreso el que tiene que decidir cuándo, si y cómo debería retornar Zelaya al poder y los dos reconocen que es una cuestión política que tiene que ser resuelta políticamente", agregó Shannon, según el cual, ambas partes han empezado ya a dirigirse a la cámara legislativa hondureña para "buscar apoyo político" a sus divergentes posturas, si bien ésta "no tiene un plazo fijo" para tomar su decisión.
"Pero lo importante es que hay una amplia esperanza de que los dos respetarán la decisión sea cual sea", subrayó Shannon, para quien la creación de un gobierno de unidad nacional y de una comisión de verificación "asegurará que esto pase".
Shannon explicó que tras el cierre del acuerdo, la pasada madrugada, con el que se pone fin a cuatro meses de crisis iniciados con el golpe de Estado del 28 de junio, la alta delegación estadounidense enviada por la secretaria de Estado, Hillary Clinton, para presionar por una salida visitó a ambos dirigentes para felicitarles por su "liderazgo y visión política".
Con todo, Shannon advirtió de que la implementación del acuerdo será "complicada" y afirmó que Honduras va a necesitar "mucha cooperación" de la comunidad internacional para mantener el proceso.
"Pero ahora estamos en el buen camino hacia unas elecciones pacíficas" el 29 de noviembre, se felicitó. "Es un momento importante para Honduras, es un acuerdo hecho por los hondureños para resolver la crisis de Honduras", insistió.
El alto funcionario estadounidense destacó además como hecho prácticamente inédito la resolución pacífica de la crisis que ha mantenido en vilo a todo el hemisferio occidental durante más de cuatro meses.
"No recuerdo otro país de América Latina que haya sufrido el tipo de ruptura democrática y constitucional que tuvo Honduras el 28 de junio y que haya sido capaz de encontrar una salida a esa ruptura y repararla mediante el diálogo interno", alabó, haciendo hincapié en que la solución se ha logrado "pacíficamente, sin violencia y sin ninguna imposición externa".
"Esto es un enorme logro para Honduras y un gran logro para la Organización de Estados Americanos (OEA), demuestra el valor y validez de la Carta Democrática Interamericana", sostuvo.
(Cortesía: Andina)