Con las puertas cerradas amaneció la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann, por la huelga nacional indefinida que acatan los catedráticos desde el pasado 23 de setiembre.
Martín Llapa, representante de los docentes universitarios, indicó que esta medida de radical se adopta debido a la falta de atención del Gobierno Central, que hace caso omiso al pliego de reclamos.
Entre las principales demandas de los catedráticos de las universidades públicas a nivel nacional, se encuentran la dotación de mayor presupuesto para sus instituciones, así como la homologación salarial, la misma que debió realizarse en el mes de enero.
"Si estamos en huelga, es responsabilidad del Gobierno, específicamente del Ministro de Economía y Finanzas, que debió cumplir con homologarnos en enero y hasta octubre no cumple con hacerlo", indicó el dirigente.
Llapa, dijo que la medida continuará mientras no se obtenga una respuesta favorable a los pedidos que mantienen. Indicó además que mañana se realizará una marcha por el centro de la ciudad, para explicar a la población el por qué de nuestra paralización.
En otro momento, el dirigente pidió a la comunidad estudiantil, el respaldo en esta medida de lucha, asegurando que todo lo que se logre repercutirá en el beneficio de los alumnos.
Minutos más tarde y ante la presencia del representante de la oficina de asesoría legal, sociólogo Carlos Rojas Hostas, los docentes decidieron abrir las puertas y permitir el ingreso de los estudiantes, sin embargo los catedráticos continúan con la medida y se rehúsan a continuar con el dictado de clases.