Reyli Román Figueroa Coharita (18), se viene recuperando exitosamente en el hospital regional Hipólito Unanue, luego que el pasado lunes resultara herido de bala en el abdomen con un revolver que había encontrado en la calle muy cerca de su vivienda ubicada en el sector de Para Grande.
Los galenos indicaron que su estado de salud va progresando exitosamente, y que este disparo accidental por suerte no ha complicado órganos internos. Mientras tanto la policía nacional continúa las investigaciones para dar con la procedencia del arma de fuego.
Los miembros del orden por lo pronto ya cuentan con algunas huellas registradas en el revolver, lo que serviría para la identificación de las personas que usaron este objeto antes de haberlo dejado abandonado en la vía pública.