(Prensa Latina) El presidente constitucional hondureño, Manuel Zelaya, llegó hoy al punto fronterizo con Honduras de Las Manos para cumplir su promesa de reingresar al país del que fue expulsado por un golpe de Estado.
Sólo 100 metros separan a Zelaya de Honduras, donde las fuerzas del orden reprimen los intentos del pueblo por ir a recibir al mandatario, tal como sucedió tres semanas atrás cuando intentó retornar por el aeropuerto internacional de Tegucigalpa.
El mandatario había dicho que viajaría a la región de Ocotal, pero su comitiva cambió el rumbo y siguió derecho hacia Las Manos, uno de los tres puntos por donde prometió que ingresaría a Honduras para iniciar la reconciliación nacional.
Se espera que Zelaya intente dialogar con los militares, pero nadie sabe lo que pueda pasar del otro lado, pues las fuerzas del régimen golpista manifestaron que todavía no tenían órdenes específicas sobre cómo proceder.
En la localidad hondureña de El Paraíso, a unos 12 kilómetros del punto fronterizo nicaragüense, se suceden escaramuzas entre la población que pretende avanzar hacia la zona de encuentro, y la policía que les impide el paso.
A pesar de la brutalidad policial, los manifestantes continuaban en sus posiciones, tratando de proseguir por caminos alternativos, atravesando zonas verdes y sembradíos, mientras el presidente avanzaba a la frontera.