Pobladores de la comunidad de Ancomarca no confían en los funcionarios del Proyecto Especial Tacna (PET), quienes les han ofrecido terrenos en predios agrícolas de Tacna, a cambio de sus terrenos en el distrito de Palca, para construir pozos hídricos. Según los comuneros, los funcionarios del PET les dicen que esos pozos son urgentes por la escasez hídrica, pero que serían compensados con terrenos en el valle de Tacna.
El gerente de estudios del PET, Fermín Gárnica, confirmó que sí se pagarían indemnizaciones a los pobladores de Ancomarca, intercambiando sus tierras. Sin embargo, Gárnica aseveró que los comuneros serán beneficiados por el proyecto Vilavilani II, que ampliará la frontera agrícola en la zona de La Yarada Alta.
Allí se ubicarían los terrenos que el PET quiere intercambiar. Pero Gárnica aseveró que no hay obligación en aceptar la propuesta. Sin embargo, muchos de los comuneros no quieren cambiar sus tierras, ya que culpan a los pozos de agua subterránea que se han construido, de generar la sequía en la zona.
SIN AGUA EN TACNA
Pero la escasez hídrica en Tacna es un problema que comienza a sufrir la población cada vez más. El reflejo más crudo está en la represa de Paucarani, cuyo rendimiento hídrico colapsó por la sequía. Según Gárnica su rendimiento alcanzará ajustadamente a diciembre.
Por ello, el gerente de estudios del PET defiende la apertura de pozos de agua subterránea. "El plan hídrico anticrisis indica que 5 pozos tienen que funcionar de forma permanente hasta diciembre…los pozos del Ayro rehabilitado por el PET, desde el mes de diciembre hasta mediados de febrero que llegaron las lluvias, han sido la solución para el agua en Tacna", refirió Gárnica.
En total hay 14 de pozos de agua construidos en el Ayro y que son el soporte que alimenta de agua a la población y agro tacneño. De ellos, sólo nueve pozos están operativos y cinco están inhabilitados, los mismos que se volverían operativos con el compromiso de distintas instituciones.
La EPS Tacna se encargaría de la rehabilitación dos pozos, mientras que el Gobierno Regional y la Municipalidad Provincial de Tacna, asumirían un pozo cada uno.
Gárnica reconoce que el PET ha provocado impactos ambientales en la zona andina producto de sus obras, sin embargo, está realizando un Programa de Manejo Ambiental (PAMA), que influye una serie de proyectos e indemnizaciones. "Queremos curar las heridas. Entre mitigaciones e indemnizaciones estamos llegando a nueve millones de soles. Ese PAMA tiene que indemnizarlos a ellos, la producción no lograda, la carne no lograda, la lana no lograda", aseveró el funcionario del PET.