Una vez más, los funcionarios públicos parecen dar muestra del mal uso que se le puede dar a los bienes del estado.
El pasado 14 de febrero al promediar las 11:00 hrs, el Director Regional de Salud, Javier Palao Castelles, fue sorprendido por las cámaras de Radio Uno, en compañía de trabajadores del sector salud, al interior del restaurante "Frutos del Mar", en el balneario de la Boca del Río.
El hecho no tendría nada de irregular, de no ser porque tanto Palao Castelles como los trabajadores del Minsa, eran trasladados por una camioneta de la institución y una ambulancia del Centro de Salud Bolognesi.
Al percatarse de la presencia de los periodistas, Javier Palao y sus acompañantes abandonaron el establecimiento y se dispersaron de forma inmediata.
En su descargo, Palao Castelles, sostuvo que su presencia en el restaurante, se debió a que se encontraba acopañando a los brigadistas de Defensa Nacional, que cada fin de semana se desplazan hasta el balneario, a tomar sus alimentos.
"Nosotros hemos firmado un convenio con este restaurante, porque existe un presupuesto para la alimentación del personal de Defensa Nacional. La camioneta fue a mi casa, me recogió y me reuní con mi personal para darles algunas indicaciones", sostuvo el funcionario.
Añadió también que aquel fin de semana, fueron los trabajadores del Centro de Salud Bolognesi los que tuvieron que bajar hasta la playa, razón por la cual se trasladaron en la ambulancia de dicho establecimiento de salud.
El Director de Salud, también intentó explicar la presencia de la camioneta del Minsa, diciendo que se trasladó en este vehículo oficial, para participar del simulacro de Tsunami que se realizó el viernes y la ceremonia cívico patriótica que se efectuo el domingo 15 de febrero.
"La camioneta bajo el domingo y se quedó en mi domicilio, para ahorrar combustible que es lo que más nos hace falta", dijo Palao.