Pasado el medio día se inició el operativo de desalojo de las cerca de 200 familias que habitan en el sector "Unión Juventud de Pocollay", con la venia de la juez provisional del juzgado civil comercial, Krushenska Gutiérrez, quien dispuso la intervención a pesar de saber que el terreno en litigio fue revertido al Ministerio de Agricultura y debía ser el estado quien disponga las medidas a adoptar.
Un gran contingente policial comenzó el ingreso a los predios, algunos a pie y otros montados en caballo, intentaron hacer retroceder a la población que aguardaba enardecida.
Ante el inminente ingreso de las fuerzas del orden, los pobladores comenzaron a lanzar objetos contundentes, respondiendo la policía de similar manera, llegando incluso a golpear a hombres y mujeres con las varas de reglamento.
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Mientras esto sucedía por la parte sur, cargadores frontales hacían su ingreso por el sector norte, para destruir las precarias viviendas que fueron instaladas en estos predios en el año 2001, después de ocurrido el terremoto.
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Las personas que resultaron heridas por el enfrentamiento, en algunos casos fueron atendidas en el mismo lugar del enfrentamiento y en otros casos se los trasladó hasta el servicio de emergencia del Hospital Regional Hipólito Unánue.
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Una vez terminada la parte crucial del desalojo, el coronel de la policía, Marco De Casanova conjuntamente con el Fiscal de Prevención del Delito Javier Castillo Ñique, pidieron a los pobladores que de manera pacífica terminen de retirar los enseres que tenían en sus viviendas, para evitar el uso de la fuerza.
