La perito norteamericana Kate Doyle, respondió las preguntas de la sala y los abogados de la parte civil y defensa del acusado, en el marco de la nonagésimo sétima audiencia del juicio a Fujimori, en la sede de la DIROES.
Doyle expuso sobre documentos desclasificados por parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos, los cuales, según dijo, contienen información sobre una estrategia de "doble cara" desarrollada durante el régimen de Alberto Fujimori, en donde se decía "respetar los derechos humanos" pero a la vez se cometían crímenes como los de Barrios Altos y La Cantuta.
La perito resaltó también una conversación entre el embajador de Estados Unidos en el Perú, Anthony Quainton y Fujimori en diciembre del año 1991, en la que le mostró su preocupación por lo ocurrido en Barrios Altos. Dicha conversación forma parte de la información de los documentos.
Gloria Cano: Estos documentos se enlazan con los hechos de Barrios Altos y La Cantuta.
Para la doctora Gloria Cano, la perito Kate Doyle ha sido clara en resaltar la política pública del régimen fujimorista, que se ufanaba del respeto a los derechos humanos cuando se firmaban las convenciones, o algunos tratados internacionales pero que, por otro lado, realizaba los operativos de exterminio y violaciones a los derechos humanos: "Es importante lo dicho sobre la política clandestina que se evidencia en muchas cartas y comunicaciones, preocupaciones del propio embajador de Estados Unidos, no solo por los hechos en sí, sino también por la poca seriedad, incluso voluntad de obstaculizar las investigaciones".
Cano agrego que existe un documento con un ofrecimiento de la embajada de Estados Unidos para que el FBI apoye la investigación de los restos en Cantuta. "Sin embargo, como todos sabemos, nunca se hizo caso a ese ofrecimiento y se eligió un laboratorio en Inglaterra, pagándole quince mil dólares a una persona para que llevara los restos y que misteriosamente se perdieron luego", dijo la abogada.
"Hay que recordar que Fujimori dijo en su interrogatorio que él no conoció de la participación del Ejército en Barrios Altos, sino hasta mucho después, en el año 93, con la denuncia del General Robles. Sin embargo, en uno de los documentos desclasificados se señala que el propio embajador de Estados Unidos, Anthony Quainton, es quien pregunta a Fujimori –en una ceremonia del Ejército realizada el 13 de diciembre de 1991– sobre rumores respecto de que un escuadrón del Ejército, que en ese momento estaba siendo homenajeado, había sido autor del crimen de Barrios Altos. Fujimori podía haber dicho primero que no conoció, que no leía Caretas, que eran sesgadas las informaciones, pero no podrá decir ahora que el embajador Quainton no le mencionó lo que ocurrió en Barrios Altos", finalizó.
Sobre el cuestionamiento que el abogado del acusado pretendió realizar a estos documentos, la doctora explicó: "Doyle ha sido clara en señalar que en este tipo de documentos hay análisis, hay hechos. Pero también información donde se señala si es o no contradictoria con otros elementos. Es decir, no es que sea una prueba en sí, sino que se tiene que enlazar con los hechos. Si no hubiera habido Barrios Altos, Cantuta, ni los nueve eventos que el destacamento Colina asume se realizaron de noviembre del 91 a julio del 92, estaríamos hablando en el aire. Pero tenemos un documento que habla de una política clandestina de eliminación y tenemos luego los hechos en el expediente sobre el accionar del grupo Colina. Uno se enlaza con otro".