Más de 47 mil personas cruzaron la frontera con Perú en Chacalluta y Santa Rosa.
Complejo fronterizo Chacalluta Arica-Chile.
Cumpliendo con su rol de protección fronteriza y a través del despliegue de más de 80 fiscalizadores cada día, Aduanas Chile realizó una fuerte fiscalización en los pasos fronterizos Chacalluta y Santa Rosa, siendo así, durante las primeras 72 horas de funcionamiento del nuevo sistema integrado fronterizo se realizó el control de 8.581 vehículos particulares y de pasajeros y más de 47 mil personas.
Entre el miércoles 16 y el viernes 18 de agosto, el ingreso a Chile fue de 2.174 automóviles particulares, 2.080 vehículos de pasajeros y 23.988 personas. Mientras que saliendo desde Chile a Perú, los controles aduaneros registraron 2.871 autos, 1.456 buses, taxis y transfer y 23.821 ciudadanos chilenos y extranjeros.
Para cumplir con la alta demanda que tiene el paso fronterizo con mayor flujo de personas del país, que el 2016 registró más de 6 millones de usuarios, y el desafío que significa el nuevo formato integrado entre Chile y Perú, el Servicio Nacional de Aduanas aumentó su dotación para poder atender con eficiencia las 5 islas habilitadas para el ingreso a Chile y las nuevas zonas de atención de los funcionarios chilenos en el complejo peruano.
Como parte del sistema integrado, cada día más de 80 funcionarios de la Aduana Regional de Arica y de otras zonas del país, distribuidos en turnos de mañana, tarde y madrugada, son los que deben efectuar la labor fiscalizadora entre Chacalluta y Santa Rosa, complejos que están abiertos las 24 horas del día y los 7 días de la semana.
El Director Regional de la Aduana de Arica, Hugo Yávar Oñate, destacó que «desde la Dirección Nacional se hicieron todos los esfuerzos para cumplir con tener una mayor dotación de cara al control integrado. Estamos comprometidos en lograr que los usuarios tengan una mejor experiencia al cruzar la frontera, pero también en brindarles protección y seguridad en todo momento».
TACNA
Como se recuerda, colectiveros expresaron malestar por el sistema integrado alegando que éste presenta demoras en la atención debido a la carencia de personal motivando largas colas. Además de cambios en la plataforma de estacionamiento de los colectivos que los demora aún más en el servicio.