Ambas selecciones tuvieron que sufrir para vencer a sus escuadras. Francia venció a Nigeria mientras que Alemania de poco nivel derrotó a duras penas a Argelia. Ahora ambos se enfrentarán en la siguiente llave.
El equipo de Didier Deschamps enfrentó a la mejor versión del equipo africano y sufrió muchísimo superarlo. Los galos siguen avanzando en el torneo pero cada partido que pasa siguen dejando dudas.
Errores caros. El único error de Vincent Enyeama le costó el partido al equipo africano. El 1 nigeriano tuvo 75 minutos espectaculares donde atajó de todo. Pero un mal cálculo en una salida tras un tiro de esquina fue bien aprovechado por Paul Pogba. Ya en los descuentos, otro horror nigeriano, sentenció el encuentro. Joseph Yobo anotó en propia puerta y despidió tristemente a Nigeria con un 2-0.
Horror arbitral. Hasta los errores de los árbitros favorecen a Francia. Esta vez, el árbitro estadounidense Mark Geiger dio un giro al encuentro cuando no expulsó a Blaise Matuidi luego que lesionará a Ogenyi Onazi con una violenta entrada.
Poco fútbol. El equipo de Didier Deschamps mostró superioridad en el mediocampo en todos sus encuentros. Siempre superó en la posesión del balón al equipo rival. Pero la falta de claridad en los últimos metros es evidente. La mayoría de sus goles llegaron de balón detenido, contragolpe o por errores del rival. Tal vez, Francia este siendo víctima de los errores de su técnico al conformar la plantilla. Las ausencias de Franck Ribéry y Samir Nasri se hacen cada vez más notorias cuando faltan las ideas.
Alemania sufrio demás. Argelia quería cobrarse una cuenta pendiente con Alemania de hace 22 años. Ningún argelino perdona ni olvida el ‘Pacto de Guijón’ en España 82. Así, el equipo argelino salió con la sangre en el ojo y se jugó la vida frente al favorito del torneo. La batalla duró 120 minutos donde los alemanes sufrieron más de la cuenta.
Partido duro. Alemania recién pudo respirar tranquila en el minuto 92. André Schurrle se infiltró en el área rival y con un sorpresivo taconazo devolvió la calma a los europeos. Heridos en su orgullo, los argelinos fueron por la hazaña. Pero Mesut Ozil los aniquiló cuando fusiló la portería rival en el último minuto y selló la victoria alemana. Abdelmoumene Djabou asustó nuevamente a los alemanes cuando revivió a los suyos con el 2-1 en los descuentos. Pero el tiempo se le acabó a loa ‘zorros del desierto’.
