Jenny Miranda, madre de la menor de edad violada en el Distrito de Gregorio Albarracín la noche del sábado 1 de diciembre, denunció que los efectivos policiales de Radiopatrulla y de la Comisaría del Menor y de la Mujer actuaron con deficiencia y poca sensibilidad social cuando acudió a ellos para que ubiquen a su hija y allanen la zona para capturar al inescrupuloso sujeto que perpetró el execrable acto.
Según lo relatado por la desconsolada e impotente mujer, el hecho ocurrió al caer la tarde, cuando la preadolescente de tan sólo 11 años se dirigía junto a su hermano, de 5 años, hacia el Parque de la Familia, en el Cono Sur de la ciudad.
En el trayecto, un sátiro golpeó en la cabeza al pequeño y raptó a la menor, llevándola a rastras hacia un descampado ubicado cerca de la Institución Educativa Arias Copaja, donde desencadenó sus bajos instintos.
"Mi niño llegó sangrando, y me dijo que habían arrebatado y arrastrado a mi hijita, llamé pidiendo auxilio a la policía, llamé por celular y me dijeron que espere en Colegio Viñani porque Radiopatrulla no querían ir hasta donde estaba, marcaba más de diez veces y me cortaban", manifestó la inconsolable mujer.
"Luego, asimismo con mi niño sangrando en brazos he tenido que buscarla, así la he encontrado con una vecina y me dijeron que salga hasta el Colegio Copaja… me demoré porque tenía que tomar un auto y cuando llegué ellos estaban bien estacionados en el óvalo", continuó.
Posteriormente, los policías se limitaron a rondar por la zona cercana a una "bloquetería", lugar donde se habría perpetrado el acto, negándose a descender del vehículo por no contar con baterías para sus linternas.
Luego, los efectivos condujeron a la menor al a Comisaría de Mujeres, donde le pidieron que espere al Fiscal de Turno, quien jamás llegó al despacho policial.
A causa de ello, la menor no recibió asistencia médica por horas, puesto que los policías, negligentemente, le dijeron a sus progenitores que no toquen ni laven las partes íntimas de la pequeña hasta el lunes, día en el que recién sería chequeada por el Fiscal y el Médico Legista.
"Me indigna, no podía esperar hasta el lunes con mi niña así, así que no aguanté y me la llevé al hospital del seguro", agregó la madre, lugar en donde aún permanece internada.