Hace 132 años, valerosos tacneños abandonaron sus hogares y familias para enrumbarse hasta el Campo de la Alianza para defender el suelo patrio, entonces no lo sabían, pero dejarían una huella imborrable en miles de jóvenes que año a año reviven esta hazaña heroica y que hoy hicieron derramar más de una lágrima en el campo santo. En su homenaje, escolares y jóvenes de instituciones educativas de Tacna, representaron a agricultores anónimos y héroes desconocidos que aunque, su identidad es un misterio, han dejado una enseñanza inmortal en miles de jóvenes que encuentran en este gesto, un signo digno de imitar.
Jóvenes tacneños rinden tributo al héroe desconocido que ofrendó su vida por la patria
Un singular mar humano conformado por jóvenes y estudiantes de diversas instituciones educativas, se dio cita esta mañana en el Campo de la Alianza para acompañar a otros escolares que emulaban el gesto de la Columna de Para y la Columna de Sama y sobre todo para rendir tributo al “Héroe Desconocido” que ofrendó su vida por la patria pese a la diferencia en tropas y armamento en comparación a las huestes chilenas.
Fueron los agricultores de Para y Sama, personificados en escolares de Lastenia Rejas y Joaquín Inclán, los que encabezaron esta hazaña en homenaje a esos valerosos hombres que aunque no pudieron contra las fuerzas opresoras, dejaron una inmortal enseñanza de valor y dignidad, que jóvenes tacneños reconocieron y emularon.
Con trajes de antaño y con el mismo sentimiento en el corazón, los escolares lanzaron el tradicional grito para iniciar la lucha. Luego, el sonido de una sirena nos recordó la inmolación de estos heroicos peruanos y las lágrimas de cientos de rabonas tacneñas, nos hicieron rememorar la orfandad de miles de familias que sufrieron viendo partir a sus esposos, hijos y hermanos por defender la patria que los vio nacer.
Los escolares de la I.E. Lastenia Rejas de Castañón dirigieron la ceremonia central en homenaje a estos valerosos personajes desconocidos y los más destacados tuvieron el honor de izar el pabellón a media asta, el encendido de la lámpara votiva, la remembranza del Museo de Sitio y la tradicional poesía en honor a estos héroes anónimos.
